sábado, 7 de noviembre de 2009

Cien mil días sin policías

Una recreación del comisario Santos, personaje de la historieta “Cien mil días sin policías”, publicada por la revista Fierro (Ochentista) / Click sobre la imagen para ampliar / Lápiz sanguina, lápiz sepia, lápiz pastel negro y pasteles sobre papel de embalar.

12 comentarios:

viruta dijo...

hum... yo le hubiera hecho un mini chizito

El Fan Nº1 dijo...

cacho perro, pero conste que no todos los polis roen hueso...

Anónimo dijo...

Pero si hasta se puede tocar, Tomi!!! qué textura, éste sí que es un perro guardián, igualito a los mordelones de mi ciudá!

anais dijo...

por mi barrio hay una leyenda q reza "el mejor policia es el policia muerto". Y creo q este Bicho no escapa al rezo este, no, no...

el Tomi dijo...

No se preocupe Viruta, estos animales ya vienen capados. Lo que les cuelga ahí es una hernia inguinal.

el Tomi dijo...

Un razonamiento un tanto europeo el suyo, Número Uno, pero es cierto, no todos los polis roen hueso, algunos los usan para hacer caldo.

el Tomi dijo...

Investigué el término "mordelones", Fraguita, muy bueno, de todos modos yo a uno de estos no le tocaría ni el culo con una caña de pescar, mire lo que le digo.

el Tomi dijo...

Yo creo que la muerte no mejora a nadie, Anais, y menos a uno de estos.

viruta dijo...

ja! extraordinarias respuestas y sobre todo porque sé que te salen como escupida de lama glama.

el Tomi dijo...

Te voy a hacer una confidencia, Viruta, no tengo nada contra los guanacos, pero si las respuestas suenan bien es porque salen como escupida de músico, no de guanaco.

Miolnir dijo...

No sé cómo me perdí esa historieta suya, Tomi, si es de los ochenta, yo por esa época no me perdía ninguna.
Me encanta este dibujo, veo que todos lo felicitan por el perro, pero para mí es un chancho. Yo tenía un amigo policía decente, y se murió a los treinta años pobre.

el Tomi dijo...

No se haga problemas, Miolnir, hasta yo mismo perdí un montón de historietas.
Pd: Le ruego que sepa disculparme pero lo de su amigo el policía decente ni lo lamento ni se lo creo.